La verdad es que tengo una suegra guapa guapa y con muchas virtudes, pero lo mejor de ella creo que es ¡que ha aprendido a hacer crochet! ;) Y encima es una alumna aventajada. Lo primero que hizo, un bolso chulísimo que me regaló. Le enseño lo que son los
amigurumis, y en un pispás hace un dragón (al que curiosamente llama "Sauri"...). Y ahora me ha sorprendido ¡¡¡con estas bolas de Navidad!!! En blanco roto y rojo, y además son exclusivas y sólo podéis encontrarlas en mi salón ;)
El árbol ya lo había adornado en dorado y rojo y no le iban bien, así que he buscado otro más acorde. Es de madera, muy mono, y con todo me ha quedado un centro de mesa de lo más original, al menos para mí.
A mí me das aguja e hilo y me puedo echar a llorar, así que si os gustan y queréis hacerlas sólo os puedo decir que la idea le vino haciendo el dragón-dinosaurio, pues por lo visto el cuerpo es una pelota. Si os animáis, mandadnos fotos!
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El árbol es de Pórtico |
2 comentarios:
at: 13/12/11, 15:43 dijo...
Que lindas...me gustan pero sera un proyecto para el prximo año ..por ahora estoy atareada con los conos de pino y los arbolitos de fieltro...que talento ...saludos
iela
at: 15/12/11, 17:47 dijo...
Son preciosas esas bolas!! Tienen el encanto de las cosas hechas a mano. Yo también soy un desastre con las agujas, como mucho me cojo el dobladillo de los vaqueros y siempre me queda una pierna más larga que la otra ;)
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